¿Prestar o no prestar libros? Un verdadero dilema.

Hace un rato conversaba con una amiga y de repente salió este tema de prestar los libros, algo que siempre ha sido debatido ella dice que ni loca los prestaría porque le encantan los libros. La verdad es que yo pienso que si alguien me pidiera prestado un libro se lo daría, eso sí, me tomaría mis precauciones, si es alguien a quien le encanta leer tanto cómo a mi, sólo le diría cuídalo, y sabría a lo que me refiero.

A mi me gustaría que hubieran muchos más lectores cómo a todos, y sí de pronto un amigo que nunca lee se ve interesado por algún libro que tengo, ya sea porque me vió leerlo y quiere saber porqué parecía un desquiciado mientras lo leía o porque el título y/o la portada le llamó la atención o alguna otra cosa, ahí si le haría una lista de cómo va a cuidarlo, y aquí hay cuatro razones por las que haría esta lista, que de seguro muchos ya conocen:

El  temible resaltador (o marcatextos): Qué lo hagan en un libro de la escuela lo entiendo, pero ¿Hacerlo en una novela o un cuento? Ok, te gusta una frase, pero mejor escríbela en una hoja en blanco aparte, en un post it, tómale una foto con tu celular, sácale una fotocopia a la página y enmárcala o ahí haz todo lo que quieras, pero NO LO HAGAS EN EL LIBRO ¡Por favor!

Dedos con saliva: Recuerdo que mi papá se lamía el pulgar cuándo contaba billetes y se me hacía algo asqueroso, así que le pregunté porqué lo hacía y me dijo que así pasaban más rápido. Bueno quizás sea cierto, pero yo nunca lo he hecho y menos con un libro, no es que se me haga asqueroso pero es cómo una falta de respeto a quien te prestó el libro.

Apuntes: De nuevo, en los libros de la escuela lo acepto, pero ¡No en mis libros! Esto es casi idéntico al resaltador (Quienes lo hacen tienen un rincón especial en el infierno ¬¬'), si lo hacen porque no tienen nada a la mano para apuntar, háganlo con lápiz y sin presionar para que luego pueda borrarse y el libro sea tan perfecto cómo antes, ahora que si lo hacen sólo porque están aburridos:

Comida y otras cosas: Una vez presté un libro y cuando lo abrí estaba lleno de restitos de galletas en el medio de las páginas, fue algo que me sacó de quicio en ese momento, no porqué mi libro quedara oliendo a galletas, sino porqué además de eso a mitad de una página tenía una huella de perro (Aunque ahora que lo escribí se me hizo gracios porque me imaginé a la mascota de mi amigo leyendo jajajaja).

¿Ustedes que piensan? ¿Compartirían sus libros? ¿Los han prestado y quieren contar su historia?