Reseña: Morir no es tan fácil de Belinda Bauer

Título: Morir no es tan fácil
Título original: Rubbernecker
Saga: No
Autor: Belinda Bauer
Editorial: Roca editorial
Fuente: Envío editorial
Idioma de lectura: Español
Idioma original: Inglés

SINOPSIS

El cuerpo que Patrick Ford está examinando en clase de anatomía está intentando decirle que ha sido víctima de un asesinato. La vida ya es suficientemente extraña para el obsesivo Patrick, incluso antes de intentar resolver un posible homicidio.

Especialmente cuando nadie cree que un crimen es lo que pudo haber sucedido en realidad. Ahora Patrick deberá mantenerse lo más alejado posible del peligro para poder resolver el misterio, a la vez que intenta sacar a la luz todas las evidencias.

Una historia en la que el protagonista aprende tanto de un hombre muerto, como de los seres que le rodean. Una obsesión que se mueve entre la vida y la muerte.

Mi opinión

Cuando alguien muere, es como si entrara por una puerta y, una vez que se cierra, ya no puede volver.

Patrick es un chico con síndrome de Asperger. Cuando era un niño su padre murió atropellado por un automóvil, estando él delante y una persona le dijo algo sobre que había ido a otro lugar a través de una puerta. Patrick no logra entender qué le pasó a su padre, dónde está la puerta por la que cruzó... y cree que diseccionar cadáveres le ayudará a comprender lo que pasa cuando alguien muere. Por ello, se mete a estudiar Anatomía y junto a otros estudiantes le toca diseccionar un cadáver y tratar de hallar la causa de su muerte. Pero a Patrick algo no le cuadra cuando cuando descubren la causa oficial de la muerte, él cree que el hombre ha sido asesinado. Y comienza a investigar por su cuenta para averiguar lo que en realidad le sucedió al hombre que ahora están diseccionando.

La historia está contada desde tres puntos de vista por un narrador omnisciente y un narrador en primera persona, con partes que parecen inconexas, algo que al principio sí me confundía un poco y hacía que mi lectura fuera muy lenta, pero poco a poco fui acostumbrándome y conseguí agarrarle el ritmo. Los capítulos de la novela son cortos y tienen bastante diálogo y el ritmo de lectura es bastante ágil debido a esto.

Pero el no quería ir a fiestas, porque odiaba a la gente y no entendía los juegos, así que le dio lo mismo. Al fin y al cabo le fascinaba el ritmo de las hormigas, aunque eso no quería decir que quisiera ser una.

Siento que el libro no es una sola historia y eso lo hace más auténtico pues hay tres tramas distintas y cada una corre paralela a la otra por... razones que no diré ahora pero entenderán quienes ya hayan leído el libro. Por un lado está la historia de Patrick y el cadáver, Sam un paciente en coma que cuenta su historia en primera persona y por último la historia de Tracy (que la verdad creo que está de más en el libro) una de las enfermeras que cuidad a Sam, y que está enamorada del esposo de otra de las pacientes a las que cuida.

Todos los personajes tenían sus puntos fuertes y puntos débiles bien delineados, fue muy fácil "conocer" a cada uno, incluso a los que sólo aparecían por un par de páginas y de los que la autora no daba ninguna descripción, peero, me fue difícil no elegir un favorito y ese fue el protagonista, Patrick. Me pareció un personaje bastante curioso, pues por su síndrome él puede armar un cubo rubik en menos de cinco minutos, memorizar una gran cantidad de cosas y recordar todo casi como sí lo hubiera vivido hace unos segundos, pero sin embargo no puede distinguir entre la ironía y la verdad o darle un abrazo a alguien, esto da pie a situaciones que al menos en mi retorcida cabeza son un poco graciosas entre tanto momento sombrío.

Aunque las cosas no pasaran en el orden esperado, acababan pasando.

El final, o debería decir los finales (? me dejaron impactado, todas esas partes y pequeñas pistas que la autora iba dejando a lo largo de su narración cobran sentido y se van conectando para acabar en algo que a falta palabras calificaré como explosivo. En verdad quedé muy sorprendido, hay muchas cosas que no esperaba que acabaran como lo hicieron y aunque la última página no me convenció del todo, el libro me gustó bastante.

MI FRASE FAVORITA

El amor nunca es malo, da igual de dónde venga; me lo enseñó Alice.

Gracias a Penguin Random House por el ejemplar.